Sufrir una crisis de pareja tras las vacaciones, es bastante habitual dado que pasamos juntos más horas de lo normal, es entonces cuando nos damos cuenta que nuestra pareja es insoportable, que no tenemos nada en común o incluso que nos cae mal.
Septiembre y octubre son los meses con más demandas de separación y divorcio (según los datos del Consejo General del Poder Judicial en España). Así que nuestro primer Carpe Diem Podcast, hemos querido dedicarlo Crisis de pareja tras las vacaciones.
Principales motivos que nos llevan a romper tras las vacaciones
- Pasamos más tiempo juntos, durante el resto del año apenas nos quedan momentos para pasar en pareja y mucho menos para hacer planes algo complicados.
- Las expectativas son altas, programamos las vacaciones pensado que lo pasaremos genial y no siempre tiene que ser así. A veces podemos sufrir contratiempos que nos complican la vida. Comparar lo que habíamos imaginado con lo que ha terminado por suceder puede hacer aumentar mucho la frustración.
- Solemos disponer de momentos en los que podemos no hacer nada, eso da espacio a la “pensar demasiado en la relación” y abre la puerta al análisis (a veces exagerado) y al desánimo. Es posible que no nos hubiéramos dado cuenta de lo que no nos gustaba porque apenas nos habíamos parado a pensarlo.
- Si el sexo no ha sido satisfactorio durante el resto del año, justificándolo por la falta de tiempo o cansancio, es posible que tampoco durante las vacaciones esto se resuelva del todo, lo que hará que nuevamente aparezca la frustración.
- A menudo el trabajo es la excusa perfecta para justificar nuestra infelicidad, pero durante las vacaciones, tampoco nos sentimos felices (es necesario encontrar un nuevo motivo, ilusión…).
- Pasar 24 horas con nuestros hijos, pueden añadir estrés a la relación.
¿Qué nota le pondrías a tu relación?
Tal vez no estés en crisis de pareja, pero no tienes muy claro si vuestra relación es suficientemente buena. Por tanto os proponemos un forma de evaluarla.
Imagina una regla con marcas del 0 al 10 dónde 0 es “muy infeliz”, 10 es “completamente feliz” y 5 es dónde imaginas que se pueden encontrar la mayoría:
Si analizamos los distintos aspectos que forman parte de nuestra vida (administrar el dinero, a qué dedicamos el tiempo libre, cómo damos y recibimos afecto, y el sexo…) ¿Qué grado de acuerdo o desacuerdo tenéis en cada uno de estos aspectos?
Una vez tengamos “la foto” de dónde está nuestra relación, podremos trabajar para mejorar aquellos puntos o ámbitos donde no estamos a gusto. Por ello os proponemos:
Objetivo: Reciprocidad
Os proponemos crear 2 listas:
- En la primera anotaremos 10 COSAS QUE MI PAREJA HACE POR MI Y QUE SABE QUE ME GUSTAN.
- En la segunda anotaremos 10 COSAS QUE HAGO PARA MI PAREJA QUE SÉ QUE LE GUSTAN.
Una vez realizadas las listas, revisar si son equitativas o no, si podemos ampliar la una o la otra…
Diario de las cosas buenas
Y por último, os proponemos que al llegar a casa dediquéis un rato a estar juntos y deciros TODO lo que durante el día os ha hecho sentir bien, en lugar de todo lo que os ha generado malestar. Esto nos permite relacionar el ver a la pareja en momentos agradables y nos fuerza a estar atentos todo el día en las cosas buenas y así poder recordarlo (esto mejora nuestro estado de ánimo).
Del mismo modo registrar (en nuestra cabeza o en un papel) todo lo que el otro hace porque sabe que nos gusta (cambiar el foco es el primer paso para cambiar todo lo demás.
Si hacéis todo esto, no sólo conseguiréis remontar las vacaciones sino que además vuestra relación saldrá reforzada.
RECORDAD QUE…
Este trabajo merece la pena siempre que no se den conductas violentas, de abuso, humillación…
Si este es el caso puedes pedir ayuda:
Teléfono 016 – 016 online en el caso de la violencia de género